Los personajes de la galardonada serie El Reino, ese grupo corrupto, retorcido y que se vanagloria de su poder, regresan para una nueva temporada, que marcará el final de la historia.
Con una mirada gélida alimentada por las dudas internas, el pastor evangélico convertido en presidente Emilio Vázquez Peña reflexiona sobre cómo puede cambiar la situación en Argentina. Luego, su tranquilizadora esposa Elena atempera cualquier incertidumbre. “Librarás al mundo del diablo para siempre”, insiste, mientras la mirada inquietante de su esposo se transforma en una sonrisa cada vez más amplia de iluminación.
Este momento crucial tiene lugar en la más reciente temporada de El Reino, que comienza unos años después de la primera, cuando los otrora populares teleevangelistas Emilio (Diego Peretti) y Elena (Mercedes Morán) comienzan a liderar Argentina como las figuras políticas más poderosas del país. Él es presidente. Ella es su asesora más cercana y también supervisa su iglesia. Pero a medida que el clima político cambiante de su país se ve amenazado por un levantamiento, la pobreza y una violencia sin precedentes causada por una guerra santa, Emilio, Elena y su círculo íntimo se encuentran en una carrera para restaurar el orden moral y la fe, y, en última instancia, para salvarse a sí mismos. “Creo que la segunda temporada es muy superior a la primera”, dice Mercedes Morán, quien interpreta a la intrigante Elena. “Los personajes están apagando incendios por las consecuencias de la primera temporada. Todo es mucho más épico esta vez”.
Emilio (Diego Peretti) y Elena (Mercedes Morán)
El drama político y religioso de alto riesgo (conocido como The Kingdom para el público de habla inglesa) fue creado por Marcelo Piñeyro y Claudia Piñeiro. Conocidos por su apreciación de los asuntos mundiales, los creadores de la serie idearon el mundo de El Reino a partir de pura ficción. Las cautivadoras historias de la serie, llenas de acción y una gran cantidad de temas tabú, llamaron la atención, lo que la llevó a ganar varios galardones en los Premios Platino 2022 en Madrid. El Reino se llevó los premios a Mejor miniserie o teleserie iberoamericana, Mejores creadores de miniserie o teleserie, y Joaquín Furriel, que interpreta a Rubén, el amenazador jefe de campaña, se llevó a casa una estatuilla al Mejor actor de reparto. “El reconocimiento y el atractivo de El Reino se deben a que las audiencias se conectan con la historia”, dice Morán. “Esta temporada afirma la ficción, el lenguaje. Es fantástico y mágico con muchos protagonistas [involucrados] en cosas que solían ser políticamente incorrectas”.
La segunda temporada de El Reino continúa la historia del pastor Emilio y su familia, quienes oraron, adoraron y convirtieron su negocio basado en la fe en un esfuerzo innegablemente lucrativo gracias a un grupo de devotos seguidores. En la primera temporada, buscando expandir su imperio, Emilio comenzó una campaña para convertirse en vicepresidente. Cuando su compañero de fórmula presidencial fue asesinado, Emilio persistió y finalmente se convirtió en el líder de Argentina.
La nueva temporada de El Reino encuentra a Emilio sumergido en su presidencia, perseguido por profundos y oscuros secretos que resurgen de su pasado. Desde el asesinato hasta la pedofilia y el homoerotismo, el patriarca conocido por su obsesión con los muchachos y el poder se encuentra en una batalla del bien contra su propio mal. Junto a Peretti, Morán y Furriel, regresan a esta temporada de El Reino Chino Darín como el abogado convertido en profesor Julio Clamens; Nancy Dupláa y Santiago Korovsky como los exfiscales; y Peter Lanzani como Tadeo, el hijo adoptivo del pastor.
Tadeo (Peter Lanzani)
Bastian (Juan Ingaramo)
Elena (Mercedes Morán)
Durante un viaje en su limusina con chofer, Emilio compara la política de la presidencia con un tablero de ajedrez, diciendo que para “mantenerse vivo, necesitas que tus peones te protejan, te rodeen. Incluso tienen que estar dispuestos a morir por su rey”. Muy pronto, los deseos de Emilio se cumplen con la ayuda de un grupo de hombres ajenos a su equipo presidencial oficial, quienes hacen planes para fortalecer el estatus del presidente.
Mientras tanto, Tadeo surge como una figura querida entre la gente de Argentina cuando un video de él denunciando la corrupción se vuelve viral luego de la muerte de un joven. Interpretar al bien intencionado Tadeo le permitió a Lanzani expandir el alcance de su personaje esta temporada. “En la primera temporada, Tadeo parecía asustado, pero no lo estaba”, dice Lanzani, quien afirma que sus extensas conversaciones con Piñeyro lo ayudaron a encontrar el núcleo de su personaje. “Tadeo no quería avanzar, estaba estancado, pero en la primera temporada se revelaron varias cosas. En esta temporada, avanzamos rápidamente: Tadeo sigue siendo la misma persona de fe, pero no necesariamente basándose en el catolicismo o el evangelio. Es una persona amable... un poco más visceral, sin ser irrespetuoso. La temporada actual también lo lleva por un camino que él no eligió, sino que lo eligió a él”.
En varios momentos de la nueva temporada, muchos personajes se cuestionan su misión. En un momento, mientras Elena está sentada en su iglesia, se pregunta si un poder superior aprueba sus acciones. No solo obtiene una aclaración, sino que se vuelve evidente cuál será el destino de todos a medida que se acerca el episodio final.
“Ser parte de El Reino despertó mi imaginación”, dice Morán, quien admite que le da una inmensa alegría interpretar a personajes como ese. “Debido a la oscuridad de Elena y a que es alguien que está en un gran estado de negación, ella emerge de manera brillante y, como actriz, es una hermosa contradicción poder interpretarlo”.
